Schopenhauer lo decía: hay rosas sin espinas, pero no espinas sin rosas. Demasiadas espinas para tan bonita rosa, digo yo. Una sola luna ha pasado, felicidad ayer, tristeza hoy, ¿por qué? Dudas, dudas y más dudas: ¿fue real? ¿fue igual para los dos? Respuestas obvias pero no claras; real fue, distinto para los dos. Todos pueden ser el cielo, pero lo más probable es que sean el infierno. Dudas y dudas. Espero que esta bonita rosa haga crecer muchas espinas en mí, pero que se esfumen cuando la vuelva a encontrar, haciéndolas ligeras y fáciles de olvidar. © Maria Nefeli Panetsos
"Ma sarà troppo tardi; ed io me n'andrò zitto tra gli uomini che non si voltano, col mio segreto" - Eugenio Montale