Cada paso que damos, cada palabra que decimos, se van con el viento, no tienen sentido. Eso decimos a veces, pero en realidad todo se acumula, todo se vuelve un nosotros. Ese paso que estás dando ahora mismo mientras caminas sobre el asfalto seco y áspero de la ciudad, rodeado de los horribles e irritantes ruidos de coches, personas, obras, animales. Pobre paso, pobre entorno tan triste y frío, decadente. No nos damos cuenta, pero si nos lo cuentan, giramos la cabeza, damos un rápido vistazo a lo que nos han descrito y volvemos a nuestro andar. No observamos, no miramos, no sentimos nada de lo que percibimos, somos robots, son robots. Podrías no serlo, sí, tú, esto va dirigido a ti, yo ya lo conozco, yo conozco los errores y falos del mundo, los he observado y te lo estoy facilitando, no seas desagradecido y por lo menos escucha . Escucha lo que va a ser de tu vida, un caos, un mundo sin control, lleno de incertidumbre e injusticias, claramente, injusticias hacia tu ser, nunca haci