Cuando te das cuenta de esa realidad, de ese deseo, de esa esperanza. Querer y darte cuenta de que no vives donde debes, de que tu mente y tu estpíritu son almas pertenecientes a otro mundo, a otra ciudad, a otro mundo y ambiente. De que tus palabras y tus ilusiones son las de una época pasada, olvidada y desaparecida. Te preguntas ¿por qué estoy aquí y no ahí? ¿Por qué tengo que leer e imaginarme cosas que podría y debería estar viviendo? No quiero leer las experiencias de otros, quiero que sean las mías, no quiero llamar la atención por mis gustos anticuados o ya "fuera de uso" en esta época insesible y mecánica, dependiente de unos valores económicos y materiales. Ser romántico es aburrido, esperar una carta es aburrido, soñar es aburrido. NO. Estoy harta de que la gente vaya corriendo por las calles estresada, o que vaya cabizbaja y perdida, sin saber a dónde va. No hablo de la gente, poca, casi nadie, que decide ir perdida, que decide en ese preciso insante no pens
"Ma sarà troppo tardi; ed io me n'andrò zitto tra gli uomini che non si voltano, col mio segreto" - Eugenio Montale