Y los minutos latían, mi corazón añoraba el tiempo pasado, un suspitro, un recuerdo vibrante, recorre mis pupilas, inevitable, deseos de vivir pasadas miradas y sonrisas. Minutos interminables de lágrimas sinceras sin instantes pausados, de serenidad. Armonía infinita, eterna e inalcanzable, vibración de palabras serenas, un horizonte desesperado. © Maria Nefeli Panetsos
"Ma sarà troppo tardi; ed io me n'andrò zitto tra gli uomini che non si voltano, col mio segreto" - Eugenio Montale